viernes, 31 de enero de 2014

Investigan sólo 2% de casos de trata

El observatorio ciudadano pide que autoridades asuman la responsabilidad de combatir y prevenir este delito. Foto: Cuartoscuro
En México existe baja efectividad en el combate a la trata de personas, ya que a nivel federal sólo en 10% de los casos se inició una averiguación previa, mientras que a nivel estatal es de 2 por ciento.
El Observatorio Nacional Ciudadano Seguridad, Justicia y Legalidad alertó que las instituciones encargadas de combatir este delito no tienen cifras claras ni cuentan con diagnósticos, lo que provoca que no se diseñen políticas públicas adecuadas para combatirlo.
El estudio del Observatorio refiere la poca efectividad que existe en el país para combatir este delito, ya que de 846 casos registrados por las autoridades del 2010 al 2013 en los estados, sólo se lograron 17 condenas; es decir, una efectividad de sólo 2 por ciento. A nivel federal, ese índice es de 10 por ciento.
En conferencia de prensa, Francisco Rivas, director del Observatorio, expuso que existe cierta opacidad de información, lo que dificulta conocer la dimensión del fenómeno de trata de personas en México.
Explicó que el Observatorio, a través de sus investigadores, solicitó información, pero ni la Procuraduría General de la República (PGR) ni la Secretaría de Gobernación (Segob) les proporcionaron datos básicos sobre el número de averiguaciones previas y condenas.
Francisco Rivas afirmó que la mayoría de las víctimas de trata de personas son mujeres, menores de edad, mexicanas y provenientes de sectores vulnerables.
RECOMENDACIONES
Ante tal panorama, el Director del Observatorio recomendó que las autoridades asuman la responsabilidad de combatir y prevenir este delito mediante una política pública que involucre a todos los niveles de gobierno; que den especial atención a grupos vulnerables, generen estadísticas confiables, que se elaboren diagnósticos dirigidos a erradicar este delito y que la Secretaría de Gobernación dé a conocer el diagnóstico sobre trata de personas que solicitó a la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito, hace más de un año.
Con base en las solicitudes de información, el Observatorio dio cuenta de que el mayor número de detenciones se han realizado en Puebla (74) y Baja California (72); entre ambas entidades concentran más de la mitad de las detenciones realizadas por este delito (53.09 por ciento). Por su parte, los estados del norte como Baja California Sur, Durango, Sinaloa y Zacatecas, contestaron que no cuentan con registro de detenciones relacionadas con trata de personas.
En tanto, Tlaxcala y Baja California concentran 65.95% de los procesos judiciales abiertos por el delito de trata de personas, seguidos por el estado de Tabasco con 13.82% de los registros de procesos judiciales por la comisión de este delito. Por su parte, las autoridades de los estados de Baja California Sur, Durango, Sinaloa y Zacatecas informaron que desde el 2010 no se cuenta con registro de procesos judiciales abiertos.

miércoles, 29 de enero de 2014

LAS REDES SOCIALES, INSTRUMENTO DE LA TRATA SI NO SE TIENE CUIDADO.

Víctima recomienda extremar cuidado en redes sociales

Recomienda tener cuidado con los datos personales que se publican en la web. 
La escritora colombiana Marcela Loaiza quien fue víctima de trata, cuenta su historia

TLAXCALA La escritora colombiana Marcela Loaiza, quien fue víctima de una red internacional de tratantes de personas, recomendó a los jóvenes extremar precauciones al utilizar redes sociales en Internet como Facebook, ya que son una herramienta que utiliza la delincuencia para "enganchar".

Entrevistada durante un encuentro de Organizaciones No Gubernamentales que se desarrolló en Tlaxcala, la escritora dijo que la delincuencia está utilizando la Internet para ubicar y engañar a los jóvenes, por lo que "deben extremar y tener mucho cuidado con los datos que suben a las redes sociales".

Explicó que "soy colombiana y sobreviviente de trata de personas, dirijo una organización que lleva mi nombre y he escrito los libros en los que prevengo sobre la trata de personas, el primero es Atrapada por la Mafia Yakuza, y el segundo Lo que Fui y lo que Soy".

Expuso que su organización realiza labores en diversos países de Latinoamérica y en Estados Unidos, "tenemos apoyo con la embajada americana y el Departamento de Estado para prevenir sobre la trata de personas por medio de la tecnología".

Durante el evento, denominado TechCamp, en el cual participaron diversas agrupaciones civiles mexicanas, y el que tuvo la finalidad de capacitar a estos organismos en el uso de tecnologías informáticas para realizar mejor su trabajo, dijo que los traficantes, "por medio de las redes sociales quieren enganchar".

Sin embargo, "si los tratantes llegaron ahí -al Internet- nosotros podemos contrarrestar, utilizando de una manera muy práctica las redes sociales para prevenir, sensibilizar y generar concienciar" sobre este delito.

"Mi mensaje personal es que tengan mucho cuidado con que información sueltan en las redes sociales, tengan mucho cuidado con el tipo de fotos que bajan y que sobre todo investiguen quién les está haciendo ofertas laborales, de estudio o de amistad".

Asimismo, que investiguen las páginas que ofrecen trabajo o estudios en el extranjero, si es el caso, "que tengan mucho cuidado, ese es mi consejo". 

Respecto al TechCamp dijo que se trata de un evento que busca "ayudar a las organizaciones sobre como por medio de la tecnología pueden avanzar en su trabajo".

La activista dijo que ella fue "enganchada" en Colombia cuando tenía 21 años, "fui secuestrada de Colombia a Japón, viví la explotación sexual por 18 meses".

"Ellos -los tratantes- inicialmente me engancharon porque tenía una situación difícil, era una chica de bajos recursos y de poca educación, me ofrecieron una oportunidad de empleo, me prestaron para pagar gastos ya que tenía una deuda en un hospital porque mi hija estaba enferma". Sin embargo, la deuda inicial de 500 dólares la convirtieron al 47 mil dólares.

Resaltó que después de 18 meses logró escapar de los delincuentes japoneses, que eran miembros de la Mafia Yakuza, "pero en los meses que estuve secuestrada viví la explotación sexual en todas sus modalidades, que es lo más degradante que cualquier ser humano pueda vivir".

Explicó que pudo huir con el apoyo de un cliente y una amiga, "quienes me ayudaron a escapar, fui a la embajada colombiana en Tokio, y ellos me repatriaron a Colombia". 

Loaiza señaló que después de recibir terapia sicológica por tres años, ahora que está recuperada busca compartir su experiencia para prevenir a las y los jóvenes.

"Es ahí donde empieza ya la nueva Marcela, previendo sobre la trata de personas, pues mi objetivo es mostrarles a todas las mujeres, hombres y niños que han vivido ese delito que se puede salir adelante, la manera como yo lo digo es: se puede salir del pantano".

Enfatizó que "sí yo estuve ahí, en ese fango, podemos salir adelante, no es fácil, es una lucha difícil, pero es querer, querer salir de ahí".

"No vivir como víctimas, sufrir como víctimas para que me ayuden, no, podemos a través de nuestra historia prevenir y concientizar a las mujeres del mundo entero", dijo.

Resaltó que la trata de personas se puede prevenir "hablando, denunciando, contar, mostrar todas las modalidades de la explotación como son la mendicidad ajena, la venta de órganos, el matrimonio servil, la explotación laboral y la explotación sexual", detalló.

Sobre todo hacer campañas masivas, "las organizaciones pueden mostrar sin muchos recursos qué es la trata de personas, de una manera clara y explicita para que la gente sepa", refirió la escritora.

Asimismo, dijo que "ser víctima de trata es un tatuaje que se lleva en el alma, nadie lo ve pero está ahí en tu corazón, entonces la mejor manera de ayudar a nuestros hijos es hablando, mostrar este delito y denuncio.

el informador.

domingo, 12 de enero de 2014

Colombia, país de origen, tránsito y destino de la trata de personas


Esta problemática pasa desapercibida, según informe. 70 mil personas son víctimas de este flagelo.

Colombia es un país de origen, tránsito y destino de las distintas modalidades de trata de personas, flagelo que, según un informe de la organización no gubernamental Women's Link Worldwide presentado este viernes en Bogotá, pasa desapercibido en el país.

El documento titulado ‘La trata y la explotación en Colombia: no se quiere ver, no se puede hablar’ se basa en un informe realizado en las regiones colombianas del Eje Cafetero y del Valle del Cauca.

El informe cita que, según la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), unas 70.000 personas son víctimas de la trata de personas cada año en Colombia.

Los investigadores recabaron la información en 18 entrevistas con organizaciones civiles y líderes sociales y convocaron cinco grupos focales en los que participaron 130 mujeres, niñas y adolescentes y entrevistas individuales con víctimas de la trata y explotación de personas.

El documento expone que las mujeres y niñas tienen mayor posibilidad de ser víctimas de este delito y agregó que la situación económica y la afectación del conflicto son determinantes para quienes son vulnerables a este delito.

Algunas mujeres o niñas buscan mejores opciones laborales y las redes de trata y tránsito de personas las utilizan para actividades relacionadas con el cuidado de personas, actividades domésticas y como "proveedoras sexuales".

El informe añade que según la investigación y los reportes revisados, Colombia es un país de origen para mujeres y niñas que son trasladadas a países de Europa occidental y del Este, de Asia, Centroamérica, Suramérica, el Caribe y Estados Unidos.

De hecho, se trata del segundo país de origen de víctimas de trata de personas por detrás de Brasil, según la Fiscalía General de la Nación de Colombia.

Por su ubicación geográfica, en el punto más septentrional de Suramérica y bañado por los océanos Pacífico y Atlántico, Colombia es un país de tránsito para víctimas que proceden de otros países suramericanos y africanos, con destino a Europa y a Estados Unidos.

También destaca un fenómeno del tránsito de personas de origen chino hacia Estados Unidos. Como país destino de trata de personas, Colombia recibe sobre todo mujeres y niñas ecuatorianas, en su mayoría indígenas y adultas para ser explotadas en trabajos de toda índole.

Los grupos armados colombianos también reclutan niños y niñas de Ecuador para integrar sus filas, mientras otros particulares también toman a menores indígenas de ese país con fines de explotación laboral y sexual en Colombia.

En la zona del Eje Cafetero, que comprende los departamentos de Caldas, Risaralda y Quindío, la trata de personas se convirtió en una práctica frecuente de las economías familiares y tiene habitualmente fines de explotación sexual, aunque también se registran objetivos laborales, de mendicidad ajena y "matrimonio servil".

Esta modalidad se ha registrado también entre las víctimas del Valle del Cauca, en donde son reclutados también para trabajar en el servicio doméstico y para cometer delitos que incluyen el tráfico de armas y drogas, incluidos menores de edad.

Según el informe, las rutas de la trata trasnacional han dejado de llevar en el pasado a las mujeres vallecaucanas a Aruba y a Holanda para trasladarlas hasta Panamá, España, Italia, Japón, Perú, Argentina, Chile, Bolivia, Japón, Indonesia, Corea del Sur, Ecuador, y Guatemala.

En Colombia también hay trata interna de personas, según la OIM sobre todo procedentes de los departamentos de Bolívar, Antioquía, Córdoba, Valle, Quindío y Bogotá, con destinos como la capital colombiana, Amazonas, Magdalena, Meta, Bolívar, Nariño, Norte de Santander y Antioquía.

El informe destaca que aunque Colombia ha desarrollado un marco constitucional sólido para prevenir este flagelo, falta reglamentar la Ley 985 de 2005, así como crear conciencia sobre este delito pues la trata interna de personas es invisible, hay "poca identificación de víctimas de esta modalidad" y "un mínimo número de casos investigados y sancionados".
EFE